sábado, 23 de noviembre de 2013

Paciencia y 8


En la intimidad chapurreo catalán. Son cosas de tener familia en Tarragona, supongo, y poco rubor para justificarme de forma tan boba ante la tercera intentona que llevo a cuestas a la hora de encaminar esta entrada. Total, que por no enredarme otra vez en el primer párrafo, he preferido soltarme la melena (no la tengo, descuidad, pero los artistas somos así) y comenzar a escribir lo primero que se me ha venido a la cabeza, y de ahí p'alante, como Pirelli en la máxima categoría de la competición, total, peor que a la italiana no me puede ir.

Y es que hoy, por fin sábado tibio y luminoso en Gorliz, me he sentido con ganas de tocar ese manido asunto de si Fernando se irá a McLaren en 2015; si se queda en Ferrari porque ve posibilidades de cara al año que viene o sencillamente porque ha aplicado aquello de mejor lo bueno conocido que lo malo por conocer; si acaso, que ha preferido no moverse de Maranello in saecula saeculorum, ya que para cantos de sirena bastante tiene con los de Luca Cordero di Montezemolo; o ya puestos, que ni lo uno ni lo otro, o todo junto, quién sabe, ya que como hombre de contrastada experiencia, el Nano sabe perfectamente que cuando el horizonte no está nada claro, que no lo está, lo mejor es no dar un paso del que puedas arrepentirte con posterioridad.

Sea como fuere, a nadie con dos dedos de frente se le ha podido pasar por alto que la convivencia del asturiano en La Scuderia no parece pasar por uno de sus mejores momentos. Estos días pasados sin ir más lejos, hemos asistido a un cabalístico duelo entre el piloto rosso y su patrón, con el número 8 como protagonista. Don Luca daba un 8 a Fernando por su actuación en la temporada 2013, y éste, afirmaba después que estaba contento con lograr el subcampeonato en el Mundial con el 7º o el 8º coche de la parrilla...

El 8, siempre el 8. Sin duda los dos estaban hablando el mismo lenguaje aunque ambos exageraban en sus afirmaciones, ya que Alonso merece un 14 o 15 sobre 10 por su extraordinario trabajo durante esta sesión y Monti lo sabe, y el F138 del ovetense, si acaso, es el 3º o 4º vehículo en liza, y el español también lo sabe. Pero a lo que iba, que como sospecho ahora, consciente o inconscientemente, Luca y Fernando se estaban tirando dardos pero sin pretensiones de hacerse daño, ya que el 8 en la cábala es el número de Job, a quien el diablo hostigó sin compasión para una vez probada su fe, ser restituido por Dios con el doble de felicidad que la que tenía antes del susto.

Paciencia, paciencia, parece que se están pidiendo desde hace meses las dos figuras actualmente más importantes en la de Il Cavallino Rampante a pesar de que la silly season se ha vuelto excesivamente pesadita con la rossa de un tiempo a esta parte. Pero paciencia para qué...

Bueno, llegado a este punto reconozco que no tengo ni puñetera idea de para qué demonios hace falta tanta paciencia. 2014 parece ahora mismo un esbozo apresurado y aunque teóricamente supone un punto y aparte sobre lo ya visto y vivido, nada augura que no vuelva a suceder lo que ocurrió en 2009  con el estreno de la nueva reglamentación técnica vigente a partir de entonces. En este sentido, el año próximo sí resultaría clave para Fernando y para la propia Ferrari, siempre y cuando Bernie y la FIA se comporten, porque como no lo hagan, apaga y vámonos.

Y sí, con estos datos ahora inasequibles sí sería posible contestar con luz y taquígrafos a la pregunta de si Alonso debe quedarse en Maranello o comenzar a pensar en cambiar de aires, porque tal y como están las cosas en la actualidad ni siquiera yo, que soy tan dado a aceptar apuestas y tirarme a la piscina sin saber si hay agua en ella o no, me encuentro en disposición de señalar cuál podría ser el camino que tomará dentro doce meses nuestro compatriota. Y como él tiene más información y de mejor calidad que yo, y sabe de estas cosas mucho más, por supuesto, seguro que si ha decidido aguantar otra temporada en Ferrari es porque de momento seguir vistiendo de rojo es la mejor alternativa que tiene sobre su mesa.

4 comentarios:

Alvaro dijo...

Es un hecha consumado que Alonso lleva haciendo unas temporadas excepcionales en Ferrari. Las últimas declaraciones a las que aludes en este artículo son producto del "pique" que tiene el gran jefe con su mejor piloto por decir verdades como puños....o mas bien por no callárselas. Ha sido del todo vergonzoso que escuderías con la cuarta parte de recursos que Ferrari desarrollen los monoplazas mas o menos correctamente y ellos se estanquen de una manera tan palpable. Mucho me temo que las declaraciones de Fernando Alonso son un ultimátum o como se quiera llamar porque la siguiente temporada efectivamente puede ser tranquilamente una fotocopia de la que Ross Brown dinamito con su libre interpretación del reglamento y a la que debe Button un campeonato que en otras circunstancias hubiera sido incapaz de conseguir.
A Fernando se le "pasa el arroz" y él es plenamente consciente. Salvo que las nuevas incorporaciones en forma de ingenieros de probada solvencia lo solucionen dudo que Ferrari de con la tecla a la primera y veo (aunque es desde luego mucho ver) a Fernando fuera de Ferrari en 2015.
Por cierto ¿Dónde va a trabajar al final Ross Brown en 2014?
A que nos gustaría a todos!!!

Interlagos dijo...

Es un hecho que existe un distanciamiento claro entre Montezemolo y Alonso.

Contrasta con el buen rollo y aprecio que se nota con los ingenieros y mecánicos del equipo, que saben con datos en la mano lo mucho que ha hecho Fernando por Ferrari.

Pero el que manda, manda, así que de no haber coche en 2014 todo puede ser, aunque raro se me hace ver de vuelta a Woking a Fernando. No quiero ser agorero, pero si las cosas no salen podría Fernando decir adios a este circo.

Porque ahora que Sebastian bate records con facilidad pasmosa yo recuerdo una frase pronunciada por un asturiano que creo jamás se la han perdonado: "La F1 ya no es un deporte nunca más" (o algo así).

Y es que podemos dar gracias de sus dos títulos: el primero pilló por sorpresa al stablishment, que no pudo reaccionar; y el segundo se consiguió después de superar todas las trabas habidas y por haber. Dos y no más, creo que entendéis de lo que hablo.

Un abrazo!

Anónimo dijo...

Yo no creo que Alonso tenga la última palabra sobre su continuidad o no en Ferrari. Para mi, esa es la causa del distanciamiento con Montezemolo. Todo el mundo da por hecho que Vettel acabará en Ferrari cuando termine su contrato con Red Bull en el 2016, cuando inauguren su nueva fábrica, con el túnel del viento mejorado y adaptado, no como hasta ahora. Así es el negocio y Ecclestone, Todt y Montezemolo llevan muchos años en él y en el mismo bando.
Acaso para Alonso hay mejor opción que Ferrari? Mclaren y Ron Dennis?. Lotus? no hay opción a ganar el mundial mientras Renault suministre motores a Red Bull. Mercedes? Él mismo dijo que estaba intentando ampliar su contrato con los italianos.
Para mi, la continuidad o no de Alonso en Ferrari depende de la prisa que tengan por sentar a Vettel en el coche italiano.

Susana

Interlagos dijo...

Creo que viene a cuento:
http://www.gpupdate.net/es/noticias-f1/303942/domenicali-las-palabras-no-cuentan-para-nada/

¿Ahora saldrá Montezemolo a recriminar a Domenicalli una verdad cierta como puños? ¿No fue Montezemolo quien afirmó que darían un buen coche a Alonso y Massa para poder pelear el subcampeonato de constructores?

¿Qué es lo correcto: decir la verdad y que el coche no va o engañar al tifossi y decirle que se va a pelear por algo?

Un abrazo!